“Esta obra no solo garantiza una mayor conectividad entre las rutas, sino que también representa un avance para el sector productivo y el desarrollo económico de la región”, resaltó el intendente, Gonzalo Braidot, al referirse a la iniciativa que contempla la construcción de un camino de ripio de más de seis kilómetros, que unirá de manera eficiente estas dos rutas claves en el distrito.
El Gobierno de Avellaneda, a través del programa de financiamiento Caminos Productivos, iniciativa impulsada por el Gobierno provincial que busca mejorar la transitabilidad de los caminos que conectan las zonas rurales con rutas, está llevando a cabo una obra de infraestructura que mejorará la conectividad entre Avellaneda y Guadalupe Norte.
Cabe destacar que la inversión en materiales es de 260 millones de pesos. Por su parte, el Gobierno de Avellaneda costea el equipamiento, la mano de obra y el combustible para la concreción de la obra.